Recetario para ser Venezolano por primera vez...

No es tan fácil como prepara un sobre de sopa Maggi. La novela comienza a las ocho de la noche del dia anterior a la jornada, eso si con los papeles reglamentarios, la partida de nacimiento del chamo, la madre y el padre, o las actas de defuncion de alguno de ello si es fallecido. Tomas un taxi, la odisea esta con solo al llegar. Las colas de personas que han pernoctado desde la tarde, con la misma intensión,  sacarle la cédula a su chamo por primera vez. buhoneros van y vienen ofreciendo su mercancía:  cafecito, cigarros, pastelitos, tequeños, refrescos o jugos. De hambre no te mueres si tienes cobres. 
Comienza la noche y la cola se hace bien pero bien larga de padres que han despertados a sus hijos a este sufrimiento, que la LOPNA castiga en otros, pero no lo reconoce en los propios. La vigilancia, esa luces azules y rojas que te avisan que una patrulla anda por el sector, se ven esporadicamente y con la velocidad que lleva una diarrea al baño. 
Para minimizar el cuento y no hacer un tratado filosófico del mismo. Son las ocho de la mañana, se abren las puertas y tu que has pasado la noche al cuido de Dios, ves que en primer lugar pasan los amigos, familiares, allegados o los que pagaron por un turno al bate... ojo y si el sistema se cae, te toca repetir al día siguiente.